La semana anterior a la semana pasada, la Arquidiócesis presentó sus “respuestas” a las demandas legales que se han levantado. Este es el siguiente paso en el proceso legal, el cual antecede inmediatamente al “descubrimiento.” En sus respuestas, la Arquidiócesis estipula cuales son los factores que sabe son verdad y establece que factores son negados que estan pendientes de recolección de mayor información. Este proceso es guiado por las reglas de la ley en la cual ambos demandantes y acusados tienen derechos y responsabilidades.
Las demandas que han sido presentadas proveen muy poca información y el acusado en estos casos no es un sacerdote acusado sino la Arquidiócesis. Por lo tanto hemos negado la mayoría de las acusaciones, especialmente la acusación primaria que dice que la Arquidiócesis “sabía o debió haber sabido” con anticipación sobre los abusos que estaban ocurriendo, porque no podemos estar de acuerdo con éste cargo hasta que tengamos más información acerca de lo que sucedió realmente. El proceso de una litigación civil, requiere la recolección de información con el propósito de alcanzar una justa resolución.
Al presentar estas respuestas, la Arquidiócesis no está negando que determinada víctima sufrió daños. En lugar de ello, estamos iniciando el proceso para reunir más información. Estas respuestas han sido acompañadas por ”interrogaciones”, las cuales piden información más a fondo sobre cada demanda. Hemos sido muy cuidadosos en limitar nuestras preguntas en las interrogaciones a información que es relevante a los daños que se están reclamando y a la compensación que se está buscando.
Me preocupa que algunos asuman que la Arquidiócesis no tiene derecho a un proceso legal justo. En efecto, estamos tratando de ser fieles a nuestro deseo de alcanzar una resolución justa para las víctimas y para nuestra responsabilidad de ser buenos administradores de los recursos de nuestra Iglesia local. Los recursos de la Iglesia son usados para proveer ministerios y sevicios a miles de personas.
Hemos dado y continuaremos dando la mano de ayuda a todas las víctimas. La sociedad con la escuela Kent está diseñada para permitir a esas personas que no pueden (debido a las demandas) o no desean hablar con nosotros directamente para obtener la ayuda que necesitan. La sociedad con la escuela Kent será extendida por otro mes, hasta el final del mes de Agosto. Esos que deseen recibir servicios de consejería a través de nuestros recursos y acuerdo de referencias de la escuela Kent de Trabajo Social de la Universidad de Louisville deben llamar al 502/375-6807 y dejar un mensaje. Un miembro de la facultad de la escuela Kent estará en contacto para programar una cita el día de trabajo próximo.
Este es un tiempo de mucho estress para las víctimas, los sacerdotes, y para todos nosotros quienes amamos la Iglesia. La Arquidiócesis estará llevando a cabo un servicio de expiación (arrepentimiento) el Lunes 12 de Agosto a las 5:30 de la tarde en la Catedral de la Asunción. Le pido a todos los Católicos a que tomen un tiempo ese día para orar por las víctimas y sus familias.
